Se trata del salto de agua situado en la frontera entre Zambia y Zimbabwe. De hecho al final del paseo al borde de las cataratas se encuentra un puente que actúa de frontera entre los 2 países.
A Livingstone los indígenas le indicaron un lugar llamado MOSI-OA-TUNYA el humo q truena debido al vapor de agua que rebota en el fondo y sube como una lluvia invertida. Afortunadamente a la entrada te alquilan unos chubasqueros que cuestan 2 dólares para minimizar el efecto de ducha pero con eso y con todo sales de allí empapado como una sopa. La entrada a las Cataratas cuesta 35 dolares. Si vas por la tarde sobre las 3 o las 4 hay la mitad de gente que por la mañana y es mucho mas agradable.
Tras volar casi 40 años al jubilarme he seguido viajando Este blog es el resultado de mis aventuras viajeras