Nos lanzamos a la calle bajo una lluvia persistente A la caza y captura de un taxi que nos acercara a la terminal del Jety que nos llevaría de Langkawi a Satun en Tailandia. La verdad es que fue bastante laborioso ya que ese día coincidía con una fiesta musulmana muy importante en Malasia. La travesía de una hora fue bastante tranquila
El despropósito apareció nada mas poner los pies en suelo Tailandés bajo unos chuzos de punta. Compramos en el puerto un billete de bus para Krabi. Nos meten como sardinas en una furgoneta, con las mochilas poco menos que por la cabeza, incluso con algún mochilero colgando por fuera para llevarnos del muelle de Satun a la terminal de los autobuses de esa ciudad.
Pero la guinda del pastel ocurre cuando nos montamos en el flamante autobús que ha de trasladarnos a Krabi, y nos enteramos de que como va hasta las trancas no tenemos derecho a asiento. Hemos de ir durante 6,30 sentadas en una banqueta al fondo del autobús o en el suelo según prefiramos
A todo esto no paro de llover durante todo el trayecto y se colaba el agua en el autobús.
Llegamos a eso de las 18,30 a Krabi con el trasero cuadrado y oh sorpresa imposible encontrar un taxi en la estación para ir hasta el Hostel Todo ello regado por mas lluvia.
Por fin aparecimos agotadas en el Pak Up Hostel, menos mal que ese hostel es estupendo y las camas maravillosas. Tras recuperarnos, por la mañana salimos a descubrir Krabi. Había parado de llover y nos fuimos a ver diferentes templos que hay en esa ciudad, también nos dimos un paseo en barca por los manglares
Por la noche nos fuimos a comer al mercado nocturno. Se puso de nuevo a llover toda la noche y el día siguiente cuando salimos en un mini van para Koh Lanta seguía diluviando. De Krabi a Koh Lanta tienes un minivan cada hora y se tarda hasta el primer ferry una hora y media. Para cruzar el primer Ferry tardamos 10 minutos
El problema vino con el segundo. Tardamos mas de dos horas en poder subirnos al ferry porque resulto que de los 3 que tienen solo funcionaba uno y tenia que hacer el ida y vuelta para poder cargar de nuevo. Por fin llegamos a nuestro hotel
Éramos los únicos clientes debido a la lluvia incesante desde hacia 4 días. La mayoría de la gente había salido por patas de la isla, a punto estuvimos de hacer lo mismo pero con buen criterio decidimos darnos un día de oportunidad. Y por la mañana……oh! Milagro se ha levantado un día estupendo sin lluvia. Hemos alquilado un tuc tuc para todo el dia y hemos recorrido la isla. Es muy
bonita. Una visita obligada es darse la vuelta por la Old Lanta Town, se trata del primer asentamiento de la isla por parte de pescadores. Son unas casitas de madera sobre pilotes que están encima del agua, allí hay un montón de restaurantes muy agradables.
También hay una parte de bosque , el Lanta National Park, unas playas de arena blanca magnificas en la parte sur de la isla en la costa que da al mar de Andaman