Ayers Rock o Uluru
Desde Cairns volamos en la compañía Virgin Australia al aeropuerto de Ayers Rock en pleno desierto australiano. Hicimos escala en Brisbane porque salía bastante más barato que el vuelo directo de la Quantas . Salimos de Cairns a las 6 de la mañana y aterrizamos en Ayers Rock a las 2 de la tarde.
Palya quiere decir Bienvenido en el idioma aborigen Anangu Y esto es lo primero que te dicen nada más desembarcar. En el aeropuerto hay un par de buses que esperan los aviones que llegan para llevarlos a los diferentes hoteles de Ulara. No hay ningún otro tipo de transporte público . Lo que si hay son un par de agencias de alquiler de vehículos.
Ulara o Ayers Rocks Resort no es una ciudad , ni tan siquiera un pueblo . Es un gran complejo turístico , con varios hoteles, un camping y una plaza central con supermercado, tiendas, algun que otro lugar para comer y una oficina de turismo en donde puedes contratar las diferentes actividades que se pueden hacer aquí. Asimismo también hay un par de galerías de arte aborigen. En medio de la plaza puedes ver a mujeres aborigen vendiendo las típicas pinturas aborigen. Antes de que se construyera el aeropuerto de Ayers Rock a finales de 1984 sólo existía el de Alice Spring que queda a unos 400 km del Uluru National Park .
Dentro del complejo también hay un mirador desde el cual puedes ver la gran roca Uluru.
Nos alojamos las tres noches que pasamos aquí en el hotel Lost Camel que está genial , no es el más barato pero tampoco el más caro . Totalmente recomendable .
El Resort queda a unos 15 km de la entrada al Parque Nacional
Para entrar al Parque es importante tener tu entrada comprada con antelación . Cuesta unos 38$ y es válido durante 3 días . Lo puedes adquirir o por Internet o en la oficina de turismo del Resort .
Estas tierras pertenecen a la comunidad aborigen Anangu , les fueron devueltas en el año 1985 en una ceremonia llamada Handback ya que para esa comunidad la roca Uluru es un lugar sagrado, lo consideran su hogar ancestral y son los propietarios de las tierras Uluru-Kata Tjuka que es la denominación del Parque Nacional. Actualmente los Anangu arriendan esas tierras al gobierno que es quien gestiona el parque . Desde 1987 este parque pertenece a los monumentos Patrimonio de la Humanidad por la Unesco . Los Anangu han solicitado y logrado que desde el año 2019 la prohibición de escalar Uluru , lo que refleja su profundo respeto por este lugar y su deseo de protegerlo para generaciones futuras. La cultura de Los Anangu siguen actualmente teniendo una gran influencia en esta tierra ancestral. Con su interpretación refuerza y apoya todas las iniciativas para la conservación y las visitas al parque . Se sigue practicando la cultura de los incendios controlados ya que es muy importante para el control de las praderas de esta zona . Los Anangu lo llevan practicando desde tiempos inmemorables , se suelen realizar entre Abril y Agosto de cada año. Las praderas crecen renovadas así como muchos tipos de arbustos lo que constituye un verdadero festín para muchos animales . Además es una manera de poder así controlar incendios no deseados.
El monolito tiene una altura de 348 m sobre el nivel del mar, y por debajo de la tierra baja 3 km Tanto el Uluru como el cercano, Kata Tjuta , también conocido como Las Olgas, evidencia lo que ocurrió hace millones de años y que se encuentra reflejado en las muchas historias y cuentos que pasan de generaciones en estas comunidades. Para los Anangu el Tiempo del Sueño fue el momento en el que se creó el mundo
En los alrededores de este territorio siguen viviendo grupos familiares compuestos de unos 40 o 50 individuos en donde el jefe es simplemente el más anciano. En este ecosistema encuentran abundantes maneras de alimentarse, frutos silvestres, plantas algunas de ellas medicinales, caza de grandes y pequeños mamíferos. Aprovechaban que los grandes mamíferos iban a beber a los puntos de agua para cazar el último animal de la manada para q el resto del rebaño no se diera cuenta de que faltaba uno y así no se asustaban y volvían al mismo lugar a beber.
Todo el grupo , tanto mayores como niños participaban en la caza. Con el boomerang rompían la pata del animal que así quedaba inmovilizado.
Molian las semillas para hacer un tipo de pasta como la manteca de cacahuete.
En la actualidad solo quedan 38 idiomas aborigen, y el drama es que cada vez que desaparece uno de los idiomas se pierde mucho de la cultura y tradiciones de ese pueblo ya que todo se trasmite a través de la forma oral de padres a hijos .
Muchos de los animales ancestrales que existían en esas tierras se han ido extinguiendo. Ahora el más grande es el canguro Rojo, muy difícil de ver , pero también hay dingos, el mala un marsupial con pinta de rata del desierto.
La manera de comerciar entre los grupos de aborígenes era sobretodo el intercambio entre diferentes tribus . Entre todas existía un gran sentido de ayuda y cooperación.
El atardecer en Uluru es de los espectáculos más alucinantes que he podido ver . Un verdadero festival de colores . Según se va poniendo el sol la roca va gradualmente cambiando de color
El amanecer del Uluru me pareció mucho menos espectacular que el atardecer ya que la gama de colores fue mucho menos intensa.
Ambas visitas las contratamos con Civitatis https://www.civitatis.com/es/?aid=11672
Kata Tjuka
Este conjunto de unas 36 montañas se encuentra a unos 56 km al este de la roca Uluru. Se le conoce también como Las Olgas o Monte Olga en honor a una princesa alemana amiga de su descubridor . Una de las montañas es incluso superior a Uluru con 1.066m sobre el nivel del mar . Están también formadas de granito , basalto y arenisca y al igual que Uluru tiene unos 3 km de profundidad bajo tierra . Es otro de los lugares sagrados de los aborígenes .
En el idioma Anangu , la palabra Kata Tjuta significa muchas cabezas al estar lo alto de esas rocas totalmente redondeadas.
Un paseo por la Garganta de Walpa te da una idea de cómo son de altas las paredes de estas formaciones rocosas. En el suelo hay unos enormes pedruscos que se han ido desprendiendo de los riscos.
A pesar del clima extremo de esta zona , aquí viven muchos animales que se han adaptado a estas condiciones climáticas, como son las serpientes, arañas, lagartos e incluso con un poco de suerte puedes avistar el famoso canguro rojo .
Asimismo está el problema de los animales introducidos en esta área como el camello , el ratón doméstico, el zorro, el gato y el perro . Lo cual ha modificado la fauna autóctona y ha creado problemas de acceso al agua , ya que el camello puede beber 200 litros de agua en 2 mn en los ya escasos puntos de agua donde solían beber los demás animales.
Recomiendo mucho el visitar esta parte de Australia sumamente interesante.
Melbourne
Terminada nuestra visita al desierto , tras unas casi 4 horas de vuelo aterrizamos en la ciudad de Melbourne .
Para llegar al centro cogimos el bus que va hasta el centro de transporte de la ciudad . Tienes que sacar el ticket del bus en las cajeros que están donde la recogida de maletas.
En la almendra central de la ciudad el tranvía es gratuito . Lo mejor es hacerte con un mapa de la ciudad pues siempre hay voluntarios de Tourist Information que los reparten en la calle , y así ver excactamente el recorrido gratis del tranvía .
Melbourne es una ciudad que presume de ser la más europea de las ciudades australianas . Al borde del río puedes encontrar un montón de restaurantes y bares para tomar algo . A partir de las 5 de la tarde cuando la gente sale de trabajar se suelen reunir en esa zona .
Tiene un gran número de museos y una biblioteca que bien merece una visita a parte de su Catedral Anglicana de Saint Paul .
Los museos son casi siempre gratuitos. Y en Melbourne tienes unos cuantos . Nosotras visitamos el de arte aborigen que queda cerca de la catedral en Flinder Street .
Justo enfrente del museo se encuentra la Russell Street que es la calle de los famosos grafitis de Melbourne. Estos van cambiando día a día porque los grafiteros siguen pintando encima del anterior .
Asimismo en la Lygon Street se pueden ver las típicas casas victorianas de época británica muy bien conservadas por sus moradores que se heredan de padres a hijos.
También visitamos la Casa del Capitan Cook . Sus padres la desmontaron desde su pueblo natal , la mandaron en barco y se volvió a montar en un parque de Melbourne. El caso es que Cook jamás la habitó.
Great Ocean Road y Doce Apóstoles
Pero sin duda lo que más disfruté de esta zona fue la excursión por la Great Ocean Road desde Melbourne y el atardecer en los Doce Apóstoles que contratamos con Civitatis.
Es un paseo bastante largo ya que entre la Ida y la vuelta son casi 600 km . Pero es tan espectacular que se te hace corto. A la ida se va bordeando la espectacular Ocean Road , una carretera que bordea el océano durante 240 km . Se trata de una de las carreteras mas espectaculares de Australia y está declarada Patrimonio de La Humanidad. Va desde la localidad de Torquay hasta Allansford.
Al final del recorrido por la costa llegamos a la Costa de los Naufragios o Shipwreck Coast. Se trata de las icónicas formaciones rocosas del Parque Nacional Port Campbell . Consta de formaciones calizas azotadas por el viento , las olas y la sal marina donde desde varios miradores puedes ver el extraordinario paisaje en donde se llegaron a producir al menos unos 638 naufragios de los cuales se han descubierto 240 navíos. Tanto el viento como las rocas fueron responsables directas de estos naufragios
Pero sin ninguna duda el plato fuerte de esta excursión es la puesta de sol en los llamados Doce Apóstoles . Estas emblemáticas rocas calizas , nunca fueron doce sino nueve. Al igual que las anteriores se fueron separando de los acantilados de la costa debido a la erosión , las extremas condiciones de los vientos que soplan en esta zona y las olas marinas.
Vuelta a Sydney
Al día siguiente elegimos el tren para volver a Sydney. No lo recomiendo en absoluto, tardamos más de doce horas con retrasos incluidos y además son trenes bastante antiguos. El paisaje monótono parando en pueblos casi vacíos que parecían pueblos del lejano oeste americano .
Sydney
Volvimos a pasar una semana en Sydney antes de volar de vuelta a casa . En ese tiempo aprovechamos para visitar algunas cosas que no hicimos al principio de nuestro viaje.
Opera de Sydney
Visitamos el interior de la Ópera de Sydney para ello sacamos directamente la entrada en la taquilla de la ópera para una visita en español.
A mi personalmente me gusta más por fuera que por dentro
Palm Beach
A hora y media de Sydney se encuentra la playa de Palm Beach en donde se tiene una vista de esas espectaculares puestas de Sol australianas
Blue Mountains
Otra de las visitas que no te puedes perder son las Montañas azules o Blue Mountains . Se encuentran a poco más de una hora de Sydney y es un paisaje montañoso espectacular con las Three Sisters como punto fuerte.
Nada más llegar es muy recomendable dirigirse a la oficina de información pues allí te dan toda la información sobre las diferentes rutas que se pueden hacer ya que hay un montón de senderos en esa zona. La entrada se compra a través de un QR.
Nosotras optamos por una ruta de senderismo llamada Giant Stairway sin saber exactamente lo duro que iba a ser. Detrás de la oficina de turismo empezamos a bajar cerca del mirador de las Three Sisters ignorantes de lo que nos esperaba . Una bajada entre la selva tropical de unos 1.000 escalones de distintas alturas en una vía estrecha en la que te cruzabas con otras personas que subían sin saber exactamente lo que faltaba para llegar abajo al Valle de Jamison. Tardamos más de una hora en bajar. A partir de allí ya hicimos un sendero más o menos plano durante hora y media hasta llegar a un tren con una inclinación de unos 52 grados hasta la parte de arriba . Es el tren con más inclinación del mundo llamado Scenic Railway.
Una vez arriba hay que coger otro teleférico llamado Scenic Skyway más grande que te lleva a atravesar el Valle de Jamison hasta la parte en la que has dejado el coche . Y desde allí otro sendero de unas 20 minutos para llegar al punto de partida la oficina de información.
Yo recomiendo hacer desde la oficina el sendero hasta el Scenic Skyway desde allí bajar al Valle de Jamison con el Scenic Railway volver a subir por el Scenic Cableway y volver con elScenic Skyway hacia la oficina de turismo por el sendero del principio.
Lo que hicimos fue una verdadera paliza.
Estuvimos 3 días con unas agujetas en las piernas tremendas. Pero al final nos mereció la pena la experiencia.
Quiero apuntar que tanto yo como mis amigas viajamos aseguradas por IATI Seguros . Te cuento que a través de este enlace en mi blog puedes contratar este seguro con un 5% de descuento
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Tanto en este post como en el anterior cuento en primera persona lo que ha sido mi experiencia en Australia por libre durante dos meses.